¿Debes resignarte a sufrir problemas de boca y dientes?

By José Ignacio Zalba
In marzo 24, 2015
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Nuestra boca nos permite disfrutar de la vida y es capaz de repararse a sí misma si le damos un cuidado correcto, pero también sabemos que sin una protección adecuada con el paso del tiempo comienza a deteriorarse, aparecen entonces las lesiones y los signos de un envejecimiento prematuro. No sólo en forma de caries, enfermedades de las encías, sino también como desgastes, dolencias de la cabeza y la articulación.

Aunque el deteriodo de la boca empieza en la infancia es en el envejecimiento, proceso que se empieza a manifestar alrededor de los 35 años y, de manera más evidente, en la década de los 40, donde se produce una aceleración de los problemas de la boca. Por tanto, aunque coviene comenzar a edades lo más tempranas posible un Programa Preventivo porque ayuda a preparar esas etapas donde los riesgo de problemas aumenta, siempre es buena edad para cuidarse y  evitar  que vuelvan a aparecer los problemas .

Los chequeos dentales tradicionales (la limpieza) no aportan información de valor en este campo, ya que están orientados hacia la búsqueda de enfermedades y no hacia la prevención y el bienestar de la boca. Sin embargo, los chequeos y programas Preventivos se focalizan en la optimización de los biomarcadores relacionados con la edad y la salud dental, con el fin de posicionarlos en sus valores óptimos, donde la incidencia de enfermedades es muy baja.

Actuando sobre estos biomarcadores y restableciendo el balance bioquímico y funcional se previenen enfermedades como la caries, los problemas de encías, alteraciones funcionales, procesos degenerativos, y se favorece una mejora global que repercute en todos los parámetros relativos a la salud, consiguiendo una calidad de vida óptima. La mejora es evidente a corto plazo, pero también se demuestra que con correcto cuidado, la salud  y una sonrisa bonita no son exclusivos de la juventud.

Un verdadero avance en la odontología Preventiva es que no solo permite a los niños evitar problemas sino que  a los adultos y mayores les ayuda a vivir la vida sin los inconvenientes que se asociaban al proceso del envejecimiento, como tener caries, problemas de encías, perdida de belleza dental y hasta perder dientes, que hasta ahora se entendían como inevitables y debían afrontarse con resignación.